La radioterapia suele administrarse en forma de sesiones o fracciones de radiación diaria de muy diversas formas en el tiempo, es decir, podemos modular la velocidad a la que aplicamos la radiación para los diferentes tratamientos y los diferentes tumores que tenemos que tratar. Voy a intentar explicarlo de forma sencilla para que puedan entenderlo, pues detrás de todo esto hay una serie de conocimientos radiobiológicos más o menos complejos y a los que enlazaré para aquel que quiera ilustrarse.
Si ustedes miran un informe clínico de radioterapia observarán que se explican datos tales como la dosis total, la dosis por fracción y el número de fracciones a la semana. Dichas fracciones de tratamiento se miden en unas unidades denominadas Grays, abreviado Gy o cGy (es la misma unidad dividida por 100) y mide la dosis absorbida de radiaciones ionizantes por el tejido.
En la práctica clínica existen diversas formas de aplicar las fracciones, pudiendo entonces emplear:
Fraccionamiento convencional o estándar:
La “velocidad de crucero” más habitualmente utilizada en nuestros tratamientos es de 180-200 cGy/día en una única fracción, 5 días/semana, ya que consigue el mejor índice terapéutico en la mayoría de los tumores. Habitualmente se llegan a dosis totales entre 45 a 70 Gy en 5 a 8 semanas, según el caso.
Hiperfraccionamiento:
En esta modalidad pueden emplearse dos fracciones al día de 115-120 cGy, 5 días /semana. Cada fracción debe estar separada de la anterior un mínimo de 6 horas. Las dosis totales pueden alcanzar los 80 Gy. La finalidad de este fraccionamiento, es disminuir los efectos tóxicos tardíos, aumentando la eficacia sobre el tumor y manteniendo en niveles similares la toxicidad aguda de los tejidos normales incluidos dentro del volumen irradiado. Suele esperarse en este tipo de tratamientos una toxicidad mayor, pero controlable y aceptable.
Se diferencia del anterior en que las dosis por fracción son convencionales, pero se administran dos fracciones diarias para alcanzar la misma dosis total (60 Gy) en la mitad de tiempo. La dosis de 150-200 cGy x 2 veces/día, 5 días/semana, acorta el tiempo de tratamiento y nos permite aumentar la eficacia en tumores rápidamente proliferativos. Los efectos secundarios agudos y tardíos esperados, serán por tanto mayores.
Se utiliza en algunos tumores específicos, como el melanoma por sus especiales características radiobiológicas y en otros tumores sólidos como en la mama o próstata para acortar los tratamientos sin incrementar en demasía la toxicidad. Pero donde este tipo de fraccionamiento es el rey es en los tratamientos paliativos donde lo importante es paliar con rapidez el síntoma persiguiendo una destrucción tumoral muy rápida, sin importar tanto los efectos secundarios tardíos, que pueden aparecen en mayor medida con este tipo de fraccionamiento.
Existen otras fórmulas mucho menos utilizadas como el fraccionamiento acelerado modificado, el split-course (con un tiempo prefijado de descanso dentro del curso de tratamiento) y el fraccionamiento estándar con sobreimpresión concomitante (se aplica una dosis extra a la zona del tumor durante el tratamiento estándar).
Me gustaría saber, si radiar durante 1 mes y medio a 60 gy en zona de antebrazo tras dos operaciones por histiocitoma fibroso maligno, donde apena hay músculo ya, puede producir quemaduras tan fuertes que puedan incluso fracturar el hueso, así como úlceras?. Gracias. Paciente de 92 años diabética.
Estimada lectora: Cierto es que la diabetes y los años dificultan la cicatrización, pero seguramente sus médicos le pueden valorar y en cierto modo predecir los efectos secundarios más probables, entre los que la fractura no es frecuente y el efecto sobre la piel es local, reversible y temporal. Un saludo.
EXCELENTE NOTA , NUY BUEN ILUSTRADA.
RAFAEL CERVANTES LÓPEZ
RADIOTERAPEUTA ONCOLOGO
Muchas gracias Rafael. Un afectuoso saludo.