Tres “nuevos” fármacos contra el cáncer: Besosuzumab, Abrazocinib y Caricialimus.

BESOSUZUMAB:
Mecanismo de acción:
Anticuerpo monoclonal humanizado IgG contra DEPRE1. Inhibe la proliferación de células humanas tumorales que sobreexpresan DEPRE1. Propicia la estimulación nerviosa y la respuesta cerebral a la liberación de oxitocina, dopamina y adrenalina al torrente sanguíneo, lo que genera una gran cantidad de efectos físicos. La liberación de oxitocina origina distintas respuestas físicas positivas. La dopamina produce la sensación de bienestar. La adrenalina produce una serie de cambios físicos: cambios en la presión arterial, el nivel de glucosa y el ritmo cardíaco, además de la sensación de alerta y el tono rojizo en la zona cigomática.
Indicaciones terapéuticas:
Todos aquellos cánceres primarios o metastásicos que sobreexpresen DEPRE1. Puede administrarse en monoterapia o en combinación de abrazocinib y caricialimus según respuesta al tratamiento, pues se ha demostrado el efecto sinérgico de los tres fármacos.
Posología:
Vía oral o percutánea. Ads.: Es recomendable realizar test de DEPRE1 antes de iniciar terapia. Si el test resulta positivo es importante dar una dosis inicial de choque, para luego ir administrando en pequeñas dosis a demanda del paciente. Si resulta negativo es bueno mantener una dosis de mantenimiento periódica.
Modo de administración:
Administrar bajo la supervisión de un profesional cualificado y con experiencia en su uso.
Contraindicaciones:
Hipersensibilidad a besosuzumab.
Advertencia y precauciones:
No se conoce si puede causar daño fetal o si puede afectar a la capacidad reproductiva.
Lactancia:
Se desconoce si se excreta en leche materna. 
Efectos sobre la capacidad de conducir:
No se han llevado a cabo estudios relativos al efecto sobre la capacidad de conducir y usar máquinas.
Reacciones adversas: 
No se han descrito
Interacciones:
No se han descrito 
Sobredosificación: 
La sobredosificación puede producir queilitis (inflamación labial) o sequedad de labios que puede mejorarse con bálsamo labial.
ABRAZOCINIB:

Mecanismo de acción

Inhibidor de la tristezaquinasa

Indicaciones terapéuticas

Tratamiento de cualquier tipo de cáncer primario o metastásico que sobreexprese DEPRE-1 o la enzima tristezaquinasa. Puede administrarse en monoterapia o en combinación con otros fármacos de la familia 

Posología

Vía percutánea. Varias veces al día y a demanda 

Modo de administración:

Se administra rodeando con los brazos (ya sea por encima del cuello o por debajo de las axilas) al paciente realizando una ligera presión o constricción con estos al acabar y siendo este de duración variable.

Contraindicaciones

Hipersensibilidad.

Advertencias y precauciones

Vigilar la intensidad de administración, pues si es demasiado intenso en algunos casos puede producir dolores musculares o sensación de ahogo.

Interacciones

No se conocen

Embarazo

No hay datos adecuados.

Lactancia

Se desconoce su efecto negativo.

Efectos sobre la capacidad de conducir

No se han realizado estudios de los efectos sobre la capacidad para conducir y utilizar máquinas.

Reacciones adversas

Dolores musculares, sensación de disnea.

CARICIALIMUS:

Mecanismo de acción

Prodice la liberación de citosina,  hormona de la adenohipófisis que actúa sobre el sistema inmunodepresor provocando sensación de bienestar. Inhibe el crecimiento de situaciones de estrés,  malestar físico y psiquico producido en cualquier enfermo oncológico. 
Se  han identificado a las células responsables de que sea así, al menos en ratones. Un equipo de científicos estadounidenses ha hallado en estos roedores las neuronas que son sensibles a caricialimus. El trabajo, que se publica en Nature, muestra que estas células promueven un estado de bienestar cuando se activan.

A pesar de los numerosos estudios fisiológicos que hay al respecto, esta es la primera vez que se identifican in vivo neuronas sensoriales que detectan caricialimus.

El grupo, dirigido por David Anderson, del California Institute of Technology, utilizó un pincel diseñado para simular caricialimus y que estos animales puedieran sentir, con el que rozaban las peludas patas traseras de los ratones.

Después, los investigadores utilizaron técnicas de imagen para mostrar que un tipo de neuronas, que expresan la proteína MRGPRB4, eran las que respondían al estímulo.

Estas células nerviosas carecen de fibras de mielina –una envoltura que hace que el impulso nervioso viaje más rápido–, e inervan exclusivamente la piel con pelo a través de grandes ramificaciones que, según el estudio, “se asemejan a los campos receptivos de las fibras C humanas”, que también se encuentran bajo la piel con pelo. 

El trabajo revela que estas neuronas se activan acariciando la piel peluda del animal, pero no ante una estimulación dañina, como puede ser una punzada o un pellizco. Es más, al aplicar esos estímulos nocivos se activan otras neuronas –las que expresan la proteína MRGPRD– que no responden ante caricilimus.

Para comprobar la influencia en el comportamiento, los autores desarrollaron un experimento conductual en el que activaron farmacológicamente las neuronas que detectan caricialimus, y comprobaron que esa activación tenía efectos ansiolíticos y de refuerzo positivo en los animales.

Según el trabajo, los resultados “abren una puerta para comprender la función de este tipo de neuronas durante los comportamientos naturales”.

En los ratones, la activación de estas neuronas “puede ocurrir durante algunas interacciones sociales –como el acicalamiento social–, a través de la autoestimulación o en otras condiciones de comportamiento”, explica el estudio.

Los autores concluyen que serán necesarias más investigaciones para confirmar si existen neuronas con propiedades similares en humanos. 

Indicaciones terapéuticas y Posología

En cualquier cáncer primario o metastásico. La posología administrada es siempre a demanda.

Modo de administración:

Vía percutánea

Contraindicaciones

Hipersensibilidad a caricialimus o derivados.

Advertencias y precauciones

No se han detectado efectos secundarios relevantes.

Interacciones

Véase Advertencias y precauciones

Embarazo

Se desconoce su efecto.

Lactancia

Se desconoce si caricialimus se excreta en la leche materna.

Efectos sobre la capacidad de conducir

No se han realizado estudios de los efectos sobre la capacidad para conducir y utilizar máquinas.

Reacciones adversas

No se han detectado efectos adversos relevantes.
 
Estos nombres inventados de fármacos antineoplásicos, bien podrían ser los nombres de muchos de los nuevos medicamentos conocidos como dianas terapéuticas, cuyos nombres son cada vez más difíciles e impronunciables y se distinguen de los citostáticos por su menor -en principio- perfil de toxicidad. Simplemente pretendía hacer un guiño ante la avalancha de novedosos fármacos que nos inundan en el mundo oncológico con grandes expectativas que todos esperamos que se cumplan, pero como en todo tenemos que esperar a que la medicina basada en la evidencia dictamine su veredicto.
Y no olvidar que besos, abrazos y caricias tienen un alto índice terapéutico en el enfermo oncológico. No dejemos de utilizarlos nunca.

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Concepto de paciente inteligente (smart patient): paciente experto, e-paciente y app-paciente.

Genís Carrasco es un médico intensivista que alterna su labor clínica con la docencia universitaria en el campo de la medicina basada en la evidencia y la afición a la escritura creativa que con la publicación de un libro para ayudar a los ciudadanos a afrontar la crisis sanitaria, nos ha introducido en un novedoso concepto: El paciente inteligente.
Históricamente, la primera denominación de “Smart Patient” es de origen incierto, en EEUU a inicios de los años 90. El Dr Mehmet Oz, un cirujano cardio-torácico llamado “el médico de América”, que lo popularizó con sus bestsellers y llegó a Canadá donde alcanzó la significación que ahora tiene: la de ciudadano capacitado a partir del conocimiento adquirido, mediante el autoaprendizaje de la literatura e internet, para autocuidarse y ayudar a los demás. El vocablo “paciente experto” (expert patient), apareció poco después a partir del Programa de Autocuidado de la Salud de la Universidad de Stanford, en Estados Unidos donde comenzó, y se extendió a  treinta países. En Inglaterra (“Expert Patients Program“) está previsto que el programa lo reciban 100.000 pacientes al año en 2012. Su metodología y objetivos son similares, combinar todos los elementos de la Medicina Basada en la Evidencia con los cuidados basados en las vivencias de los pacientes aunque se fundamenta, sobre todo, en cursos presenciales o virtuales departidos por expertos. El tercero, también casi un sinónimo, “e-paciente” (e-patient) fue el último es ser acuñado de la mano de Tom Ferguson,  autor de Salud Online: Cómo encontrar información de salud, Grupos de apoyo y Comunidades de Autoayuda en el Ciberespacio que fundamentaba la capacitación del paciente en adquirir las habilidades para encontrar y filtrar la información sobre salud disponible en la web y las redes sociales.
En realidad, las tres denominaciones sólo difieren en pequeños matices, como que el paciente inteligente autoaprende a partir de cualquier medio (literatura, internet, aplicaciones, etc), el e-paciente lo hace a través de la red y el paciente experto a través de cursos impartidos por técnicos (profesionales de la salud o no).

A fines prácticos se denominan a todos con el término paciente inteligente y se consideran sinónimos.

Tipología de pacientes inteligentes:
Existen 3 tipos de pacientes inteligentes; según un informe publicado en el año 2000 (Health e-People: The online consumer experience):
  • Los ciudadanos sanos y cuidadores
  • Los pacientes agudos y sus cuidadores
  • Los pacientes crónicos y sus cuidadores
 

Según dicho informe, los pacientesagudos, a pesar de representar el menor porcentaje con respecto a los sanos y crónicos, tienen un tráfico en la red mayor que los crónicos y los sanos. Los e-pacientes se están convirtiendo rápidamente en una nueva fuente de información sobre el cuidado de la salud: manejan su propio cuidado, brindan información a otros basados en su experiencia, ayudan a los profesionales sanitarios a mejorar la calidad de sus servicios y participan en una gran variedad de colaboraciones entre paciente y médico. Pero en tanto que estas capacidades de colaboración son reconocidas por el médico, se postula que serán aún más valiosas en los años venideros.

Las grandes conclusiones de este estudio son las siguientes:

  • Los pacientes inteligentes se han convertido en valiosos contribuidores y los profesionales sanitarios deben reconocerlos como tal. 
  • El arte de dar poder a los pacientes es más delicado de lo que se piensa. 
  • Se ha subestimado la habilidad de los pacientes de brindar recursos útiles online. 
  • Se ha sobrestimado la capacidad de los peligros de la información médica online. 
  • Siempre que sea posible, el cuidado de la salud debe situarse del lado del paciente. 
  • Los médicos no pueden continuar el camino ellos solos, debe ser en colaboración paciente-médico.
El paciente inteligente es un blog personal muy joven, pues nació apenas hace un año en Febrero de 2012, con el objetivo de dar respuesta a los lectores del libro sobre el mismo título que le pedían comentara las noticias acerca de la crisis sanitaria desde su perpectiva.

El blog pretende difundir la revolución del paciente inteligente, un movimiento que nació en Estados Unidos y que postula que la alfabetización sanitaria y la implicación de los ciudadanos en las decisiones sobre su salud son el mejor camino para contribuir a la resolución de los problemas de desfinanciación que sufre nuestro Sistema Nacional de Salud, ya que estos pacientes educados tienen un 40% menos de complicaciones, ingresan un 30% menos y consumen un 25% en pruebas innecesarias. La idea central es que todo ciudadano que se capacite para entender las recetas, los medicamentos, las pruebas de imagen y a los médicos será capaz de obtener siempre los mejores resultados ante una enfermedad,  tengamos la excelente Sanidad actual u otra.

Debe quedar claro que  convertirse en un paciente inteligente o e-paciente no consiste en saber hacer búsquedas con Google sino en aprender también los conocimientos básicos para  filtrar todo tipo de información antes de sumergirse en ese mar proceloso que es internet cuando se navega sin timón ni brújula. Porque el problema actual no es el acceso a la información, gracias a las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) lo que hoy sobran son datos sobre enfermedades, tratamientos, estilos de vida saludable y todo lo relacionado con la salud, sino disponer de las claves para filtrar los datos fiables de la basura informativa. Y eso se puede aprender con facilidad. Lo único que hace falta es que alguien nos ayude a gestionar ese mar de información para, acompañados por los profesionales, tomar las mejores decisiones sobre nuestras enfermedades.  

Precisamente eso es lo que pretende tanto el blog como al libro: ser ese “alguien” que nos oriente y nos ayude a entender no sólo la salud y la enfermedad sino las ventajas y limitaciones de los estupendos servicios a que tenemos derecho, incluso en tiempos de crisis, cuando necesitamos cuidados de salud. Con ese objetivo, la información que contiene el blog es eminentemente práctica y está basada en la más sólida evidencia científica.

A través de una veintena de posts se aborda donde encontrar respuestas actualizadas sobre recetas, análisis clínicos, comunicación con el médico, un método en cinco pasos para entender las enfermedades, aspectos que ya se desarrollaban en el libro. El blog recoge también información sobre la actualidad sanitaria como las alternativas propuestas por los ciudadanos a los recortes sanitarios, un diccionario sobre la crisis, recursos para obtener la mejor información sobre salud y otras aportaciones de profesionales y pacientes para las reformas que necesita nuestra Sanidad. Se trata de información actual elaborada en un estilo ameno y comprensible para cualquier persona que necesite afrontar un problema de salud. 

La aplicación de toda esta metodología en pacientes oncológicos es perfectamente plausible y en cierto modo ya se hace un buen trabajo en este sentido desde la AECC y la GEPAC, así como otras asociaciones de pacientes. 
El concepto de “App-paciente” es algo todavía más novedoso. Se trata de pacientes que utilizan aplicaciones médicas en sus “smarphones” recomendadas bien por los médicos, asociaciones de pacientes o instituciones para multitud de situaciones de salud: plataformas o redes sociales de una patología en concreto con sus propios foros y comunicación con expertos en la materia ( P ej: Plataforma Hemofilia), hasta aplicaciones para la detección de drogas en saliva (Cocachip) o como alarma para la deteción geográfica de un paciente afecto de Alheimer o aplicaciones sobre meditación y relajación (Mindfulness), o incluso aplicaciones que te recuerdan tus citas médicas, valorar tu adherencia a un tratamiento y te ofrecen sencillos consejos de salud.
Les dejo con una entrevista radiofónica a Genís Carrasco hablando sobre todo lo mencionado en este “post”.

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Cineterapia oncológica: Planta 4ª. Antonio Mercero (España 2003)

“Planta 4ª” es una película de Antonio Mercero, datada en 2003 (¡cómo pasa el tiempo, hace ya 10 años de esta película!) que recuerda a la serie de TV “Pulseras Rojas”en muchas de sus escenas pues está extraída de la vida de Albert Espinosa. La diferencia con ésta es que en lugar de narrar la vida de unos adolescentes en un hospital con diferentes dolencias, narra la vida en la planta de Traumatología de un hospital de 4 niños-adolescentes afectados por cáncer, en concreto por la misma enfermedad que padeció Albert: el osteosarcoma.

No esperen ver un peliculón a nivel interpretativo porque no lo es. Hay escenas bastante “surrealistas” o poco creíbles, pero lo verdaderamente importante que creo sí transmite y con esos ojos pretendo que la miren, es sobre la temática del cáncer y todas sus connotaciones. Se reflejan muy bien las distintas fases por las que se enfrenta un paciente oncológico: la negación, la ira, la tristeza o el dolor y la aceptación. También hay una visión muy específica sobre el cáncer infanto-juvenil y todo lo que la enfermedad conlleva a nivel personal y familiar. Y algo que me parece fundamental y del que extraigo mi propia autocrítica: la comunicación de malas noticias por parte de los profesionales (hagan clic aquí los profesionales para aprender cómo debe hacerse correctamente), el profesionalismo en el mundo oncológico, las relaciones interpersonales médico-paciente, entre pacientes, entre pacientes y familiares, etc.y las repercusiones tanto físicas como psicológicas de los tratamientos.

Aunque sólo sea por la vertiente humana y psicológica, merece que esta película sea vista por ustedes.

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Día Internacional de la Mujer (Médico y Madre) Trabajadora. 5/5 (1)

Como ya sabrán, hoy 8 de Marzo es el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. A mi personalmente, me entristece pensar que todavía existan desigualdades en cuestiones de género y por ello se tengan que “celebrar” este tipo de días. Creo con toda sinceridad que la discriminación positiva hacia la mujer o la paridad en los ámbitos políticos o en consejos de administración por “decreto ley” nos hacen un flaco favor a las mujeres, aunque la intencionalidad sea buena. Personalmente estoy más a favor de la meritocracia que el valorar a alguien en función de su sexo.

No voy a hablar de la Historia de este día, pues supongo que en otros foros se explicará hasta la saciedad. Si voy a aprovechar mi doble (o triple) condición como mujer trabajadora médico y madre para escribir esta nueva entrada y de paso poner sobre el tapete una situación, me atrevería a decir, de “invisibilidad” que mujeres como yo vivimos en el día a día. La expresión gráfica que muy bien expresa la Dra Mónica Lalanda (bloguera de “Médico a Cuadros”) en el dibujo de arriba, me parece cómica pero absolutamente real. Como la vida misma. Yo me siento muy identificada.

Durante estas dos últimas décadas se ha producido una progresiva feminización de la profesión médica. Ya nadie se extraña de ver a una mujer médico. Es un hecho afortunadamente superado, socialmente aceptado y reconocido, representando en muchas especialidades médicas el 70-80% de los profesionales. Sin embargo, esta feminización progresiva no ha ido acompañada de forma paralela de unas mejoras o acomodos en temas de conciliación familiar. Sigue siendo una asignatura pendiente, al menos, en nuestro país.

Les podría hacer un relato autobiográfico de lo que es para mí el día a día como médico, como madre y como mujer, pero para no enrollarme simplemente voy a escribir unos apuntes:

COMO MÉDICO tengo que ejercer de forma responsable, profesional, eficiente, eficaz, humana y actualizada. Mantener esos aspectos supone:

  • FORMACIÓN CONTINUADA:
    • Estudio fuera de mis horas de trabajo
    • Preparación de Sesiones Clínicas, Bibliográficas o Ponencias.
    • Asistencia a Congresos y Cursos de actualización
    • Investigación
  • ACTIVIDAD ASISTENCIAL:
    • Cumplir con la jornada ordinaria
    • Guardias o Atención Continuada

COMO MADRE deseo ejercer mi maternidad de forma consciente y responsable, equilibrada, sin sobreproteger en exceso ni ejerciendo de forma autoritaria. Entre mis tareas se encuentran:

  • Llevar y recoger a mis hijas del colegio y en muchas ocasiones preciso del Servicio Escolar de Madrugadores y del Comedor Escolar.
  • Acudir a las reuniones con los profesores (a veces a horas intempestivas)
  • Ir al Pediatra cuando estén enfermas o precisen una revisión médica o vacunas.
  • Llevarlas a actividades extraescolares.
  • Apoyarlas en los deberes escolares.
  • Agenda social: Cumpleaños, disfraces, día del Padre, etc
  • Logística del hogar, baños, comidas, etc
  • Qué hacer durante las vacaciones escolares: campamentos, actividades, etc 
COMO MUJER me merezco:
  • Tiempo para mi cuidado personal
  • Hacer ejercicio físico
  • Tiempo para los hobbies: lectura, música, dibujo, cine, compras, etc
  • Tiempo para los amigos y familiares
  • Tiempo para estar con mi pareja

Cuadrar todo lo apuntado anteriormente es en muchas ocasiones “misión imposible”. Es hacer “encaje de bolillos” y la mayor parte de las veces lo que más sacrificas es tu sueño y tu tiempo de descanso. Así que no es difícil que el estrés, el cansancio y la sensación de ir volando a todas partes haga mella en nosotras. Sinceramente, creo que nuestras madres tenían más claro su rol. Reconozco igualmente su espíritu de sacrificio y su entrega. De ellas hemos aprendido mucho. Pero nosotras no tenemos un rol definido, nuestro nivel de autoexigencia y nuestras expectativas han sido quizá demasiado altas. Queremos ser buenas profesionales, buenas madres y buenas mujeres. Somos HEROINAS con complejo de “superwoman”. Muchas veces vivo con el peso del síndrome de “techo de cristal”.

Es realmente complicado llegar a todo. No nos queda otra que renunciar en muchas ocasiones a algo y esa “renuncia” nos culpabiliza y nos duele. Quizás nos queda mucho que aprender. Debemos perdonarnos más a nosotras mismas y debemos aprender a delegar. Para ello es importante que los hombres tomen conciencia y estén a la altura de las circunstancias. Hemos de convivir y compartir de una forma lo más equitativa posible las responsabilidades familiares y laborales.
Probablemente tengan que pasar varias generaciones para que encontremos lo que yo he venido en llamar en Twitter: La Cuadratura del Círculo de la Conciliación en un Mundo 2.0. A través de la educación de nuestros hijos, haciéndoles entender con nuestro ejemplo lo que significa ser corresponsables ambos sexos por igual. También la sociedad y las instituciones deben hacerse eco de esta necesidad pues redundará en una mejor convivencia, respeto y felicidad para todos.

¡FELIZ DÍA A TODAS!

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¿Qué es el sobretratamiento? 5/5 (1)

Al hilo del “post” anterior en relación al sobrediagnóstico, tenemos otro concepto: El sobretratamiento. Se define como aquellos tratamientos médicos innecesarios. Podría ponerse de ejemplo aquellos tratamientos médicos realizados sobre una enfermedad que no causa síntomas y desaparece por sí sola, o bien tratamientos intensivos para una condición que podría remediarse con un tratamiento muy limitado o incluso sin él. Como reza el título en inglés de la fotografía de arriba : “Sobretratamiento. Por qué demasiada Medicina puede hacernos más enfermos y más pobres” de Shannon Brownlee, sería bueno hacer un análisis y su correspondiente reflexión tanto para la Medicina General como para la Oncología (en todos sus ámbitos: quimioterapia, radioterapia, cirugía, etc) sobre la necesidad o no de aplicar “demasiados tratamientos de dudosa eficacia” a un paciente determinado.

Les emplazo en la lectura de un interesante artículo de la prestigiosa revista médica “The Lancet Oncology” publicada en Septiembre de 2011 y que aquí les traduzco en su resumen de entrada:

Tratamientos oncológicos económicamente asequibles en países ricos

“El cáncer está creciendo y la enfermedad se está convirtiendo en un gasto económico importante para todos los países desarrollados. En 2008, el coste mundial de cáncer debido a muerte prematura y a discapacidad secundaria (sin incluir los costos médicos directos) se estimó en 895 mil millones dólares EE.UU.. Esto no es simplemente debido a un aumento en números absolutos, sino también la tasa de aumento de los gastos del cáncer. ¿Cuáles son los factores y las soluciones a la llamada curva de coste del cáncer en los países desarrollados? ¿Cómo vamos a darnos el lujo de ofrecer alta calidad y una atención equitativa? Aquí, la opinión experta de profesionales de la salud, responsables políticos, y los supervivientes de cáncer se han reunido para abordar las barreras y buscar soluciones para que la atención del cáncer sea asequible. Aunque muchos de los conductores y los temas son específicos de un determinado campo, por ejemplo, los costes de desarrollo enormes para los medicamentos contra el cáncer, no hay una fuerte concordancia entre ellos. Varios conductores de costes, tales como el exceso de uso, la rápida expansión, y el acortamiento de los ciclos de vida de las tecnologías del cáncer (como los medicamentos y las modalidades de diagnóstico por imagen), y la falta de investigación clínica adecuada como estudios integrados en economía de la salud, han convertido a la medicina en una práctica cada vez más defensiva, un sistema de regulación menos informado, la falta de evidencia basada en el debate socio-político, y un grado de disminución de la equidad para todos los pacientes con cáncer. Resulta urgente buscar las soluciones de reingeniería de los fundamentos macroeconómicos de los costes de cáncer (por ejemplo, los enfoques basados ​​en el valor de doblar la curva de costes y permitir que las tecnologías de ahorro de costes), una mayor educación de los responsables políticos, y un sistema de regulación informada y transparente.
Es necesario un cambio radical en la política del tratamiento del cáncer también . La tolerancia política ante la falta de equidad en el acceso al tratamiento contra el cáncer asequible es inaceptable. Los profesionales de la Oncología y la industria deben asumir esta responsabilidad y no aceptar una base de evidencia de mala calidad y un espíritu de beneficio muy pequeño a cualquier precio, sino que necesitamos la entrega de precios justos y el valor real de las nuevas tecnologías”

Jordi Varela, en su blog sobre Avances en Gestión Clínica nos habla sobre el “despilfarro” que muchas veces en Oncología se produce. Pensarán que me estoy tirando piedras a mi tejado, pero creo que es bueno que nosotros, los especialistas, y los pacientes conozcamos el alcance de esta problemática y demos los tratamientos cuando realmente existe una indicación basada en la evidencia o en pruebas. Les dejo con unos breves apuntes o “perlas” que el autor ha tenido a bien en llamar:

  • Los pacientes a los que se les administra quimioterapia deberían ser capacer de llegar a la consulta sin ayuda al Hospital de Día. Es decir deben tener un aceptable estado general. 
  • En los pacientes con metástasis no se debería forzar la quimioterapia hasta el extremo de necesitar factores de crecimiento de colonias (inyecciones para aumentar las “defensas”)
  • Debería limitarse el uso de segundas y terceras líneas de quimioterapia en el cáncer metastásico de tumores sólidos. Valorar la quimioterapia en monoterapia secuencial
  • No se deben utilizar los tratamientos citostáticos en estadios muy avanzados, salvo excepciones justificadas por evidencias científicas o ensayos clínicos.
  • No deberían realizarse PET, TAC o gammmagrafía ósea a los pacientes con diagnóstico precoz de cáncer de mama o próstata
  • No deberían pedirse marcadores tumorales, ni PET, TAC o gammagrafía ósea en el seguimiento de pacientes con cáncer de mama tratadas con intencionalidad curativa. 
  • ¿Cómo puede ser que los médicos seamos capaces de analizar la mortalidad ajustada por riesgo de una intervención quirúrgica (yo añadiría: de una quimio o una radioterapia también) y en cambio no dispongamos de indicadores para averiguar cuándo y dónde se produce la administración injustificada o desproporcionada de tratamientos tóxicos a pacientes en fase paliativa?

Todo ello nos conduce al conocimiento y la aplicación de la PREVENCIÓN CUATERNARIA: 
 
La prevención cuaternaria es el conjunto de actividades sanitarias que atenúan o evitan las consecuencias de las intervenciones innecesarias o excesivas del sistema sanitario.
La prevención cuaternaria es el conjunto de medidas adoptadas para identificar al paciente en riesgo de sobremedicalización, para protegerlo de nuevas incursiones médicas, y sugerirle las intervenciones que son éticamente aceptables.

El crédito social que legitima la intervención médica puede resultar dañado si los médicos no evitan la actividad médica innecesaria, y sus consecuencias. La prevención cuaternaria debería primar sobre cualquier otra opción preventiva, diagnóstica y terapéutica, pues es la versión práctica del primum non nocere. (primero no dañar)

Escuchar atentamente a los pacientes es el mejor método para su consecución. Es la aplicación de lo médicamente posible según las necesidades y aspiraciones del paciente. Para ello se precisa de una larga y estrecha relación del médico con su paciente, y en conseguir su confianza basada en la honradez y conocimiento científico del profesional sanitario.

La Medicina Basada en Pruebas es otro instrumento importante, al dar los valores predictivos de las pruebas diagnósticas, y las probabilidades de beneficio y daño de las intervenciones preventivas y curativas; con ello se pueden abandonar prácticas de dudosa utilidad.

Traducción:

Este es su cerebro en un cómic:

Paciente:
– ¿Está usted seguro que necesito 3 TACs ? Es sólo un resfriado.

Doctor:
– ¿Quién es el médico aquí?

Podríamos acabar como el de la foto de arriba

Les dejo con un video del British Medical Journey (BMJ) Media sobre los daños del sobretratamiento (en inglés)

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