El tratamiento de los tumores es cada vez más complejo, pues cada vez más se hace necesario emplear más de una disciplina diagnóstica o terapéutica. Es cierto que existen guías y protocolos para todas las patologías oncológicas, encontrando en ellas los posibles itinerarios a seguir en un gran número de casos. Sin embargo, no todos los enfermos son iguales y cabe por tanto disponer de un foro donde debatir abiertamente los casos y exponer los pros y contras de cada paso en concreto que tomemos.
Muchas veces los propios enfermos se sienten perplejos ante la discrepancia de opiniones de distintos especialistas, pues no saben a quién creer ni qué camino tomar. Cabe explicar también que de la misma forma para ir a Roma podemos escoger distintos caminos que nos lleven a ella, puede ocurrir que existan tratamientos diferentes para la consecución del mismo objetivo. Escoger uno u otro camino puede depender de muchos factores que van desde los factores endógenos del equipo oncológico que tengamos a factores de preferencias o características del propio paciente. Los Comités de Tumores tratan de dar un enfoque sobre la planificación integral del tratamiento oncológico, en el que varios médicos expertos de diferentes especialidades o disciplinas, examinan detenidamente cada caso, discuten la enfermedad y las posibles opciones de tratamiento para cada paciente. El Comité de Tumores puede incluir un oncólogo médico, un cirujano (general, ginecólogo, otorrinolaringólogo o urólogo, etc, según el tipo de tumor), un radiooncólogo, un radiólogo o especialista en diagnóstico por imagen, un anatomopatólogo y otros especialistas afines. De estos comités se extrae una opinión multidisciplinar o colegiada que posteriormente será trasladada al paciente y sus familiares.
Los Comités de Tumores son una buena herramienta que funciona ya desde hace muchos años en los hospitales para que el tratamiento interdisciplicar sea una realidad. La ventaja adicional de estas reuniones es que todos aprendemos de todos, se comparten conocimientos y resulta algo más fácil que cada especialista pueda “ponerse en los zapatos” del otro. Es de suma importancia adecuar la secuencia de las actuaciones de los distintos especialistas, pues coordinar a los diferentes especialistas es todo un reto organizativo. Generalmente se crean comités especializados por localizaciones anatómicas: cáncer de mama, cáncer de cabeza y cuello, cáncer urológico, cáncer digestivo, cáncer de pulmón, sarcomas, etc. Como pueden comprobar, la personalización de los tratamientos es un hecho que ya tiene su recorrido y va evolucionando con los tiempos y conocimientos en biología molecular.
Les dejo con este video (en inglés) acerca del funcionamiento de un Comité de Tumores que trabaja como equipo multidisciplinar.