Bienvenid@ a "Un Rayo de Esperanza". Soy Virginia Ruiz, una radiooncóloga que se define como médico en el sentido amplio de la palabra, con un interés especial por todo lo que rodea al enfermo oncológico. Creo firmemente en la Medicina Basada en la Evidencia, pero también en la Medicina Basada en la Diferencia y en la Experiencia. Estoy en la senda hacia una Medicina Humanista, porque si lo pensamos bien no existen enfermedades, sino enfermos…
La hormonoterapia es uno de los tratamientos indicados en determinados casos de cáncer de próstata. Conocemos desde hace años que la hormona responsable del crecimiento de las células neoplásicas en este cáncer es la testosterona que en el varón se encuentra fundamentalmente en el testículo y en menor cantidad en las glándulas suprarrenales. Así pues una de las armas que tenemos para frenar la proliferación neoplásica es la utilización de fármacos que supriman esta particular hormona. Explicaremos brevemente los diferentes fármacos que existen en el mercado, su mecanismo de acción y sus potenciales efectos secundarios.
Antiandrógenos:
El antiandrógeno más frecuentemente utilizado es la bicalutamida en forma de comprimidos vía oral a dosis de 50 mg/24h en combinación con análogos LHRH o a dosis de 150 mg/24h en monoterapia (tratamiento único).
La bicalutamida bloquea los receptores androgénicos, actuando de forma competitiva con los andrógenos circulantes obstruyendo así su acción.
Su principal toxicidad es hepática, por lo que es importante tener cuidado en aquellos pacientes con insuficiencia hepática moderada. También hay que tener precauciones es los pacientes con insuficiencia renal grave, en cardiópatas y diabéticos.
Los efectos secundarios más frecuentes son la ginecomastia (aumento del tamaño de las mamilas del varón) y la mastodínia (dolor en las mamilas). También son frecuentes los sofocos, las molestias óseas, articulares y la debilidad muscular. Pueden favorecer las diarreas. Asimismo este tratamiento favorece el conocido síndrome metabólico: aumento de peso, alteraciones de los lípidos y la glucosa en sangre y aumento de la presión arterial.
Dentro de este grupo también se encuentran otros fármacos que están en desuso:
Aunque puede englobarse dentro de este grupo tiene unas características particulares. Su mecanismo de acción consiste el bloqueo de una enzima llamada CYP17, una enzima clave para la producción de testosterona que tiene lugar en diferentes partes del organismo del paciente como testículos, las glándulas suprarrenales e incluso (y esto es lo novedoso) dentro de las células del tumor.
Este medicamento debe tomarse siempre con prednisona (corticoides) para evitar una serie de efectos secundarios y también debe mantenerse el tratamiento con análogos LHRH.
Por su perfil de toxicidad debe monitorizarse la función hepática y está contraindicado en aquellos pacientes con insuficiencia hepática grave. También puede producir hipertensión arterial, hipopotasemia (niveles bajos de potasio en sangre) y edemas que se minimizan con la toma simultánea de prednisona. Aún así deben monitorizarse estos parámetros, muy especialmente la función cardíaca y renal, teniendo especial cuidado en los pacientes que ya presenten antecedentes de insuficiencia renal o enfermedades cardiovasculares previas. Aunque es un fármaco habitualmente bien tolerado precisa de una estrecha supervisión médica para evitar problemas graves.
Los efectos secundarios que puede presentar el paciente son similares a otros antiandrógenos.
En desarrollo y pendiente de comercializar en España está: – Enzalutamida
Análogos de la hormona liberadora de hormona luteinizante (LHRH):
Son análogos sintéticos de la hormona natural del mismo nombre. Dan lugar a una castración química reversible anulando así la secreción de testosterona. Puede administrarse sólo o en combinación con los antiandrógenos (llamado bloqueo androgénico completo). Su vía de administración suele ser subcutánea o intramuscular. En los casos de combinación con antiandrógenos no debe administrarse antes de 7-10 días tras la toma del antiandrógeno. Se puede administrar de forma mensual, trimestral, semestral e incluso existe una forma anual.
Su toxicidad principal reside en la disminución de la mineralización ósea (osteoporosis) por lo que deberá tenerse en cuenta en pacientes que ya la presentan o tienen factores de riesgo añadidos (tabaco, alcohol, otros fármacos como los corticoides, etc). Estos fármacos también pueden inducir el síndrome metabólico comentado arriba, por lo que deberán tenerse en cuenta los antecedentes cardiovasculares.
El efecto secundario más llamativo son los sofocos que pueden llegar a ser verdaderamente molestos para el paciente, pues van acompañados de una posterior e importante sudoración. El tratamiento con análogos LHRH produce impotencia sexual. El paciente también notará una considerable disminución del tamaño de sus genitales externos.
Los fármacos que tenemos a nuestra disposición de este grupo son:
– Goserelina
– Triptorelina
– Leuprolide
– Buserelina
– Histrelina
La hormonoterapia en el cáncer de próstata puede administrarse en los siguientes supuestos:
Como tratamiento neoadyuvante a la radioterapia, es decir, se administra antes de la radioterapia, generalmente para reducir la carga tumoral y disminuir el volumen de la próstata, ayudando así a que la radioterapia sea más eficaz.
Concomitante a la radioterapia, es decir, a la vez que la radioterapia con el mismo fin que el apuntado arriba y para aumentar la potencia terapéutica del tratamiento con radiaciones
Como tratamiento adyuvante, es decir para ayudar a retrasar la evolución natural de la enfermedad
Como tratamiento único en los casos de pacientes en los que la radioterapia o la cirugía se encuentren contraindicados.
Como tratamiento paliativo en cáncer de próstata metastásico para aliviar la sintomatología y retrasar la evolución natural de la enfermedad.
La mayoría de las mujeres que son diagnosticadas de cáncer de mama se les prescribe hormonoterapia habitualmente al finalizar otros tratamientos previos como la cirugía, la quimioterapia y la radioterapia. La hormonoterapia en el cáncer de mama se utiliza como tratamiento en tumores con receptores de hormonas positivos que representan cerca de un 80% de los tumores mamarios (los llamados fenotipos luminales)actuando de dos formas:
Reduciendo la concentración de estrógenos circulantes
Bloqueando la acción de los estrógenos en las células del cáncer de mama
La mayoría de los estrógenos presentes en la mujer procede de los ovarios. Los estrógenos favorecen potencialmente la formación de neoplasias de mama que tengan sus receptores de hormonas positivos. Por ello se considera que la hormonoterapia reduce el riesgo de recurrencia del cáncer de mama en aquellas pacientes operadas y que sus receptores de hormonas son positivos en estadios precoces. También está indicada para disminuir el crecimiento de un cáncer de mama avanzado o en las pacientes con cáncer de mama metastásico (fundamentalmente metástasis óseas) y que tengan también sus receptores hormonales positivos.
La hormonoterapia NO es eficaz contra el cáncer de mama con receptores de estrógeno negativos.
Existen varios tipos de medicamentos de hormonoterapia, entre los que se incluyen:
Los inhibidores de la aromatasa que son:
Anastrozol
Exemestano
Letrozol
Los moduladores selectivos de los receptores de estrógeno:
Tamoxifeno (es el más conocido)
Raloxifeno
Toremifeno
Los antagonistas del receptor de estrógeno:
Fulvestrant
La hormonoterapia se puede utilizar en mujeres premenopáusicas y postmenopáusicas y en hombres con cáncer de mama. Además de la administración de hormonoterapia en las mujeres premenopáusicas diagnosticadas con cáncer de mama con receptores de hormonas positivos se puede considerar la supresión de la función ovárica con medicación, habitualmente con análogos de la LHRH, ya que los ovarios representan la principal fuente de estrógenos antes de la menopausia.
La elección de un fármaco u otro de hormonoterapia más adecuado en cada caso dependerá de:
El estado menopáusico de la mujer
El estadio del cáncer de mama
Los antecedentes de trombosis o enfermedad cardiovascular grave
La densidad ósea
Los antecedentes de patología reumática
El riesgo personal de padecer cáncer de ovario y/o de endometrio.
Los inhibidores de la aromatasa
Su función es detener la producción de estrógeno en mujeres postmenopáusicas.
Actúan bloqueando la enzima aromatasa, que convierte el andrógeno en pequeñas concentraciones de estrógeno en el cuerpo. Esto significa que hay menor cantidad de estrógeno disponible para estimular la multiplicación de las células de cáncer de mama de receptores de hormonas positivos.
Beneficios de los inhibidores de la aromatasa
Los inhibidor de la aromatasa son la mejor hormonoterapia para comenzar en pacientes post-menopáusicas. En el tratamiento del cáncer de mama de estadio temprano con receptores de hormonas positivos, los inhibidores de la aromatasa brindan más beneficios y menor cantidad de efectos secundarios graves en comparación con la administración de tamoxifeno.
El cambio a un inhibidor de la aromatasa después de recibir tamoxifeno durante 2 a 3 años (para un total de 5 años de hormonoterapia) ofrece más beneficios que la administración de tamoxifeno durante 5 años.
La administración de un inhibidor de la aromatasa durante 5 años, después de haber tomado tamoxifeno durante 5 años, reduce aún más el riesgo de recurrencia del cáncer en comparación con la interrupción del tratamiento después de haber recibido tamoxifeno.
Efectos secundarios de los inhibidores de la aromatasa
Los inhibidores de la aromatasa tienden a causar menos efectos secundarios graves que el tamoxifeno, como trombosis, accidentes cardiovasculares y cáncer de endometrio.
Sin embargo, los inhibidores de la aromatasa pueden causar más afecciones cardíacas, más pérdida de tejido óseo (osteoporosis) y más fracturas de huesos que el tamoxifeno, al menos durante los primeros años del tratamiento. Así resulta recomendable que le consultes al médico si deberías realizarte una densitometría ósea a fin de determinar si necesitarías un medicamento para fortalecer los huesos mientras recibes el inhibidor de la aromatasa.
Los efectos secundarios más comunes de los inhibidores de la aromatasa son las artralgias y éstas pueden llegar a ser invalidantes en algunos casos. Parece, según un estudio británico de 2008 que las mujeres con dolor articular secundario a hormonoterapia tenían menos riesgo de recurrencia del cáncer de mama
Los moduladores selectivos de los receptores de estrógeno,
Actúan bloqueando los efectos del estrógeno en el tejido mamario. Funcionan uniéndose a los receptores de estrógeno en las células de la mama, no habiendo espacio suficiente para que el estrógeno se acople a la célula. Si el estrógeno no está unido a la célula de la mama, la célula no recibe las señales del estrógeno que le indica que debe crecer y multiplicarse.
Las células de otros tejidos del cuerpo, como los huesos y el útero, también tienen receptores de estrógeno. Sin embargo, cada receptor de estrógeno tiene una estructura ligeramente distinta, según el tipo de célula en que se encuentra. Por lo tanto, los receptores de estrógeno de las células de la mama es diferente de los receptores de estrógeno de las células de los huesos, y estos dos receptores de estrógeno son diferentes de los receptores de estrógeno del útero.
Como su nombre lo indica son “selectivos” y bloquean la acción del estrógeno en las células de la mama, puediendo activar la acción del estrógeno en otras células, como las células de los huesos, del hígado y del útero.
Los moduladores selectivos de los estrógenos pueden utilizarse para tratar a mujeres sobretodo premenopáusicas, pero también puede utilizarse en post-menopáusicas.
Beneficios de los moduladores selectivos de los receptores de estrógenos:
El tamoxifeno es el que se utiliza con más frecuencia.
En el caso de las mujeres premenopáusicas diagnosticadas con cáncer de mama de receptores de hormonas positivos, el tamoxifeno es el tratamiento estándar.
Pueden aumentar la densidad ósea, lo que reduce el riesgo de osteoporosis.
Efectos secundarios de los moduladores selectivos de los receptores de estrógenos:
Los moduladores selectivos de los receptores de estrógeno pueden causar efectos secundarios que en ocasiones pueden ser graves como las trombosis, los accidentes vasculares y el cáncer de endometrio.
Si una paciente está en tratamiento con Tamoxifeno debe consultar ante cualquiera de estos síntomas:
Una hemorragia o flujo vaginal anormal
Dolor pélvico
Varices importantes, inflamación o sensibilidad en las piernas
Dolor en el pecho
Disnea o sensación de ahogo
Debilidad, hormigueo o adormecimiento del rostro, los brazos o las piernas
Pérdida de visión repentina
Mareos y dolor de cabeza intenso y repentino
Estos son los efectos secundarios más comunes:
Fatiga
Sofocos
Sudoración nocturna
Flujo vaginal
Cambios en el estado de ánimo
Un estudio británico de 2008 antes mencionado sugiere que las mujeres que experimentaron sofocos y sudoración nocturna cuando se sometieron a hormonoterapia tenían menos probabilidades de presentar recurrencia del cáncer de mama.
Los antagonistas del receptor de estrógeno
El nombre químico de este medicamento se llama Fulvestrant.
Actúa bloqueando los efectos del estrógeno en el tejido mamario.
Funcionan de una forma similar a los moduladores selectivos de los receptores de estrógeno como el tamoxifeno.
Los antagonistas de los receptores de estrógeno se unen a los receptores del estrógeno en las células mamarias. Si se une al receptor de estrógeno, no hay espacio suficiente para que el estrógeno se acople a la célula. Si el estrógeno no está unido a la célula de la mama, la célula no recibe las señales del estrógeno que le indican que debe crecer y multiplicarse
Reducen la cantidad de receptores de estrógeno.
Cambian la forma de los receptores de estrógeno en las células mamarias de modo que no puedan desempeñarse como deben hacerlo.
La Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO) recomienda hormonoterapia en función del estadio del cáncer y del estado menopáusico.
Cáncer de mama en estadio temprano y postmenopausia: Se recomienda que las mujeres postmenopáusicas diagnosticadas con cáncer de mama con receptores de hormonas positivos en estadio temprano sean tratadas con un inhibidor de la aromatasa como el primer medicamento de hormonoterapia. En el caso de una mujer que tomó tamoxifeno durante 2 a 3 años, se recomienda que cambie a un inhibidor de la aromatasa. Los inhibidores de la aromatasa a veces se utilizan pasados los 5 años de consumo de tamoxifeno para reducir aún más el riesgo de recurrencia del cáncer de mama.
Cáncer de mama en estadio temprano y premenopausia: Se recomienda que las mujeres premenopáusicas diagnosticadas con cáncer de mama con receptores de hormonas positivos en estadio temprano reciban tratamiento con tamoxifeno.
Cáncer de mama en estadio avanzado: Se recomienda que las mujeres diagnosticadas con cáncer de mama de receptores con hormonas positivos en estadio avanzado (metastásico) reciban tratamiento con un inhibidor de la aromatasa si previamente habían seguido de 2 a 5 años de tamoxifeno, o cuando si el tumor no responde a tamoxifeno. Recientemente se ha modificado la posología de fulvestrant observando doblando la dosis previa, una mayor tasa de respuestas en primera o segunda línea de tratamiento.
¿Cuánto tiempo debe mantenerse la hormonoterapia?
El plazo durante el cual debes recibir la hormonoterapia depende de si se toma antes o después de la cirugía, del estadio del cáncer y de los efectos secundarios que se puedan experimentar.
Las mujeres postmenopáusicas que se someten a hormonoterapia DESPUÉS de la cirugía para el cáncer de mama con receptores de hormonas positivos en estadio temprano generalmente toman un medicamento de hormonoterapia durante 5 años. Esto es lo que se denomina hormonoterapia adyuvante. En algunos casos, el médico puede recomendar otro medicamento de hormonoterapia una vez cumplidos los 5 años del primero. Esto es lo que se conoce como hormonoterapia adyuvante prolongada. Los investigadores están analizando durante cuánto tiempo debe administrarse el segundo medicamento de hormonoterapia después de los 5 años del primero.
Las mujeres postmenopáusicas que se someten a hormonoterapia ANTES de la cirugía para el cáncer de mama con receptores de hormonas positivos en estadio temprano pueden tomar un medicamento de hormonoterapia durante 3 a 6 meses antes de la cirugía para reducir el tamaño del cáncer. Esto es hormonoterapia neoadyuvante. El plazo durante el cual se recibe hormonoterapia antes de la cirugía depende de cada situación particular, por lo que el plan de tratamiento puede ser muy distinto de una paciente a otra. Se puede recomendar la hormonoterapia antes de la cirugía si el tumor es grande.
Las mujeres premenopáusicas o postmenopáusicas que se someten a hormonoterapia para el cáncer de mama con receptores de hormonas positivos en estadio avanzado (metastásico) generalmente reciben la hormonoterapia mientras sea respondedora. Si el cáncer ya no responde a un medicamento de hormonoterapia, por lo general, el médico recomendará otro medicamento.
Todos los medicamentos de hormonoterapia EXCEPTO fulvestrant que es intramuscular, son píldoras que se toman una vez al día. La mayoría de los médicos recomiendan tomar el medicamento de hormonoterapia a la misma hora cada día para que no olvidar la toma. Los medicamentos de hormonoterapia se pueden tomar con o sin alimentos.
Les dejo con un video traducido del inglés sobre cómo actúan todos estos fármacos
Existen en estos momentos 2 tests genómicos conocidos, el MammaPrint y el Oncotype DX en cáncer de mama. Son tests que han sido validados y que ponen de manifiesto la variabilidad de cada cáncer de mama, incluso de aquellos que tienen criterios inmunohistoquímicos muy similares. Para clasificar los tumores mamarios actualmente nos resulta útil saber si existe o no en el tumor la presencia de receptores hormonales de estrógenos, de progestágenos y la expresión del gen HER2. De una forma sencilla y combinando estos 3 factores predictivos, los dividimos en:
– Fenotipo Luminal A: Aquellos que tienen receptores de estrógenos y progestágenos positvos y HER2 negativo (62%)
– Fenotipo Luminal B: Aquellos que tienen receptores de estrógenos y progestágenos positvos, HER2 positivo y Ki67 > 20% (18%)
– Fenotipo HER2: Aquellos que tienen receptores de estrógenos y progestágenos negativos y HER2 positivo (10%)
– Fenotipo basal o triple negativo: Aquellos que tienen receptores de estrógenos, progestágenos y HER2 negativos (10%)
La prueba MammaPrint analiza 70 genes de una muestra de tejido de cáncer de mama en estadio temprano para determinar si el cáncer presenta un bajo o alto riesgo de recaída en el transcurso de los diez años posteriores al diagnóstico.
Cuando se consideran en conjunto con otras características del cáncer, los resultados de la prueba MammaPrint pueden ayudar a que decidir mejor junto al médico si la quimioterapia u otros tratamientos para reducir el riesgo de recaída siendo una opción cada vez más valorada.
¿Qué pacientes pueden ser candidatas a esta prueba?
MammaPrint solamente puede usarse para analizar el cáncer de mama en estadio precoz. En Estados Unidos, MammaPrint se utiliza para casos de cáncer con las siguientes características:
en estadio I o estadio II
invasivos
inferiores a 5 cm
sin afectación (cáncer) de los ganglios linfáticos
Las mujeres con diagnóstico de cáncer deben tener 61 años de edad o menos.
En otros lugares del mundo, MammaPrint se utiliza para casos de cáncer con estas características:
en estadio I o estadio II
invasivos
inferiores a 5 cm
con tres o menos ganglios linfáticos comprometidos
Tanto en Estados Unidos como en otros países, se puede emplear MammaPrint para analizar tipos de cáncer de receptores de hormonas positivos y de receptores de hormonas negativos.
La prueba MammaPrint puede realizarse solamente en muestras de tejido tumoral de la mama recién extraídas o congeladas inmediatamente después de la extracción que hayan sido tratadas o “fijadas” con una solución especial para preservar el material genético. Por esta razón, la decisión de someterse a una prueba MammaPrint debe tomarse antes de la cirugía, para que el cirujano pueda obtener una muestra reciente o congelada de las células cancerosas durante la operación. MammaPrint no puede aplicarse a tejido que haya sido preservado en una solución de formaldehído y con inclusión en cera, que es una forma común de preservar muestras de tejido que se envían a un laboratorio de patología para ser analizadas.
¿Cómo funciona esta prueba?
La prueba MammaPrint estudia un grupo de 70 genes para determinar su nivel de actividad, y luego calcula una puntuación de recaída que se expresa en términos de riesgo bajo o riesgo alto:
Un resultado de bajo riesgo en la prueba significa que el cáncer presenta un riesgo de recaída es del 10 % para los siguientes diez años sin tratamientos adicionales de quimioterapia después de la cirugía.
Un resultado de alto riesgo en la prueba significa que el cáncer presenta un riesgo de recaída es del 29 % para los siguientes diez años sin tratamientos adicionales de quimioterapia después de la cirugía.
¿En qué se diferencia el MammaPrint del Oncotype DX?
Tal vez el lector haya oído hablar de otra prueba que sirve para analizar los genes del cáncer de mama con el fin de predecir la recaída: el Oncotype DX. Si bien son similares, la prueba Oncotype DX se utiliza para analizar casos de cáncer de receptores de estrógeno negativos en estadio temprano sin ganglios linfáticos comprometidos, con el fin de determinar si hay probabilidades de recurrencia y si la quimioterapia ayudaría a reducir ese riesgo. Algunas investigaciones preliminares sugieren que la prueba podría ser informativa para mujeres postmenopáusicas con cáncer de mama en estadio II o III que se haya diseminado hasta los ganglios linfáticos.
Más de la mitad de las personas que son diagnosticadas con cáncer de mama presentan un cáncer con receptores de estrógeno positivos (ER+) y ganglios linfáticos negativos. Esto significa que el crecimiento del cáncer es estimulado por los estrógenos y puede tratarse con hormonoterapia que bloquea o reduce los niveles de estrógenos. También significa que el cáncer no se ha propagado desde el lugar original del tumor hacia los ganglios linfáticos axilares. Los ganglios linfáticos negativos son una buena señal: si no hay evidencia de células cancerosas en los ganglios linfáticos, es más probable que el cáncer esté limitado a la mama.
En estos casos cabe preguntarse por si el papel de la quimioterapia es necesario, además de la hormonoterapia. Tanto uno como otro son tratamientos sistémicos (es decir, son medicamentos que actúan por todo el cuerpo) que se administran para ayudar a reducir el riesgo de recaída o propagación del cáncer (metástasis). Los estudios han demostrado que la quimioterapia ofrece un beneficio agregado únicamente para una pequeña fracción de las personas diagnosticadas con cáncer ER+ con ganglios negativos en estadio temprano (estadio I o II) y que reciben hormonoterapia.
El análisis Oncotype DX puede ser de ayuda para que tú y tu médico determinen si el cáncer tiene o no probabilidades de:
ser recurrente
responder bien a la quimioterapia
Los resultados de este análisis, más otras características del cáncer, pueden ayudarte a decidir mejor si quieres recibir o no quimioterapia. A continuación puedes leer más acerca de los siguientes temas:
¿Qué pacientes son idóneas para las pruebas genómicas con Oncotype DX?
La mayoría de las personas diagnosticadas con cáncer de mama de estadio temprano (estadio I o II) con receptores de estrógeno positivos (ER+) que no se ha propagado a los ganglios linfáticos se consideran en bajo riesgo de recurrencia. Tras la cirugía, se indica hormonoterapia como el tamoxifeno o un inhibidor de la aromatasa (Letrozol, Anastrozol, Exemestano) para reducir el riesgo de que el cáncer vuelva a aparecer en el futuro. La necesidad o no de quimioterapia constituye otra área de incertidumbre para pacientes y médicos.
Aún cuando todos los indicios sugieren que estos casos de cáncer son de bajo riesgo, una pequeña cantidad vuelve a aparecer con el tiempo, ya sea en la mama o en la zona circundante o bien en alguna otra parte del cuerpo. Identificar exactamente qué casos de cáncer de mama de estadio temprano, ER+ y con ganglios negativos presentan riesgo de recurrencia puede ser muy difícil. La quimioterapia puede disminuir el riesgo de recaída. Por lo tanto, algunas pacientes y oncólogos médicos deciden proceder con la quimioterapia de todos modos a pesar de los efectos secundarios y el impacto en la calidad de vida. Otras pacientes eligen no recibir quimioterapia, incluso cuando presentan un leve riesgo de pertenecer al grupo que sí experimentará una recaída.
Así pues, el análisis Oncotype DX puede ayudar a la paciente y a su médico a decidir mejor sobre la necesidad o no de quimioterapia. (Algunas investigaciones preliminares indican que la prueba podría ser informativa para mujeres postmenopáusicas con cáncer de mama en estadio II o III que se haya diseminado hasta los ganglios linfáticos. Habla con tu médico si te encuentras en este grupo).
¿Cómo funciona esta prueba?
Oncotype DX se conoce como una prueba genómica: analiza grupos de genes y su nivel de actividad, lo que puede influir en el modo en que el cáncer probablemente crezca y responda al tratamiento. Una prueba GENÓMICA ES DISTINTA de una prueba genética. Una prueba genética busca mutaciones (cambios inusuales) en los genes que se heredan o pasan de una generación a la siguiente.
La prueba Oncotype DX utiliza una muestra de tu tejido mamario para analizar la actividad de 21 genes diferentes. Los genes controlan la conducta y las actividades de todas las células, incluidas las células cancerosas. Cuando las células se comportan de modo anormal, esto frecuentemente se puede rastrear hasta identificar una actividad inusual de determinados genes.
Analizar este conjunto de 21 genes puede proporcionar información específica sobre:
la probabilidad de recaída del cáncer de mama
si los regímenes de quimioterapia utilizados tradicionalmente pueden ser beneficiosos o no
Por lo tanto Oncotype DX es un ANÁLISIS PRONÓSTICO (ya que proporciona más información sobre la probabilidad o improbabilidad de recaída del cáncer de mama) y también de predicción, ya que predice la probabilidad de beneficio a partir del tratamiento de quimioterapia. Los estudios han demostrado que Oncotype DX resulta útil para ambos propósitos. La Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO) y la Red Nacional Integral del Cáncer (NCCN) actualmente incluyen el análisis Oncotype DX en sus pautas de tratamiento para el cáncer de mama precoz.
Si crees que puedes necesitarlo, habla con tu médico sobre la posibilidad de realizarte el análisis Oncotype DX. En base a este análisis, Oncotype DX asigna una puntuación de recurrencia al cáncer de mama. Esta puntuación es un número entre 0 y 100 que corresponde a una probabilidad específica de experimentar recaída del cáncer dentro de los 10 años posteriores al diagnóstico inicial. Cuanto más baja es la puntuación, menos probabilidades de recurrencia tiene el cáncer. Cuanto más alta es la puntuación, mayor es la probabilidad de recurrencia del cáncer.
Interpretación de los resultados
Una vez finalizado el análisis Oncotype DX, el médico recibirá un informe que incluye tu puntuación de recurrencia. Junto con el médico pueden utilizar los siguientes rangos para interpretar los resultados:
Puntuación de recurrencia menor a 18: esto sugiere que tienes poco riesgo de recurrencia. El beneficio de la quimioterapia probablemente sea menor y no justificaría los riesgos de los efectos secundarios.
Puntuación de recurrencia ente 18 y 31: este resultado sugiere que tienes un riesgo de recurrencia “intermedio”. No se ha comprobado si los beneficios de la quimioterapia justifican los riesgos de los efectos secundarios.
Puntuación de recurrencia mayor a 31: tienes un alto riesgo de recurrencia y los beneficios de la quimioterapia probablemente superen los riesgos de los efectos secundarios.
Con tu médico analizarán la puntuación de recurrencia en combinación con otros factores, como el tamaño y el grado del cáncer, la cantidad de receptores de hormonas que presentan las células cancerosas (numerosos o escasos) y la edad. Juntos pueden decidir si debes recibir quimioterapia además de hormonoterapia.
Al igual que otras personas, puede que una baja puntuación de recurrencia te tranquilice y prescindas de la quimioterapia. Por otro lado, una alta puntuación de recurrencia puede convencerte de recibir la quimioterapia. Si te encuentras en el grupo intermedio, deberás analizar la situación cuidadosamente junto con tu médico para determinar lo que sea adecuado para tu caso individual.
Si bien la puntuación de recurrencia constituye el dato más importante del análisis Oncotype DX, los resultados también incluirán lo siguiente:
Un gráfico que muestra la tasa promedio de recurrencia proyectada a 10 años para personas con tu misma puntuación de recurrencia: La paciente y su médico pueden utilizar esta información para medir el riesgo de metástasis (reaparición del cáncer fuera de la mama) en relación con tu puntuación de recurrencia. El gráfico se basa en los resultados de un estudio clínico realizado en 668 mujeres con cáncer de mama ER+ con ganglios negativos tratadas con tamoxifeno. Posteriormente, el tejido tumoral conservado se analizó con la prueba Oncotype DX. Las mujeres con una puntuación de recurrencia de 5 presentaban una tasa promedio de recurrencia distante de apenas 5 %, mientras que aquellas con una puntuación de 45 tenían una tasa del 30 %.
Gráficos que muestran el beneficio de la quimioterapia en personas con tu grupo de puntuación de recurrencia: Estos gráficos muestras en qué medida agregar quimioterapia al tamoxifeno puede disminuir el riesgo de recurrencia distante en 10 años. A medida que aumenta la puntuación de recurrencia, también aumenta el beneficio de agregar la quimioterapia. Estos gráficos se basan en los resultados de un estudio clínico con 651 mujeres que recibieron solo tamoxifeno o bien tamoxifeno combinado con quimioterapia.
Puntuación de los análisis de receptores de hormonas: Como parte del análisis de 21 genes, la prueba Oncotype DX también analiza la expresión de los genes receptores de hormonas: tanto receptores de estrógeno (RE) como receptores de progesterona (RP). El informe incluye una puntuación numérica que indica en qué proporción resultaron positivas (o negativas) las células cancerosas con relación a la presencia de receptores de estrógeno y receptores de progesterona.
La mayoría de las puntuaciones de receptores indican algún punto entre 3 y 12 en la escala. No obstante, es más importante analizar qué indica la puntuación en relación con los siguientes valores:
Si la puntuación de RE es de 6,5 o más, esto significa que las células presentan receptores de estrógeno positivos.
Si la puntuación de RP es de 5,5 o más, esto significa que las células presentan receptores de progesterona positivos.
El acceso a estas cifras puede ayudar a que tú y tu médico decidan cuál es la probable respuesta del cáncer a la hormonoterapia. Si parece que el cáncer responderá bien a la hormonoterapia, esto puede ayudar a decidir si es necesaria o no la quimioterapia.
En una gran mayoría de los casos, estos resultados de análisis de receptores de hormonas coinciden con los resultados de análisis anteriores que indicaron si el cáncer es positivo o negativo. No obstante, existe una mínima posibilidad de que el análisis Oncotype arroje un resultado diferente. Si eso ocurre, hable con su médico acerca de las opciones disponibles.