Lactancia emotiva
Cineterapia oncológica: Pelucas. España. 2014. José Manuel Serrano Cueto.
La radioterapia en el cáncer gástrico
El cáncer gástrico representa aproximadamente un 10% de los tumores que se diagnostican al año, siendo más frecuente en países asiáticos que en los países occidentales. Según la localización dentro del propio estómago puede dar lugar o no a síntomas, habitualmente de carácter inespecífico y digestivo: dolor, náuseas, vómitos, pérdida de peso, plenitud, cambios en el ritmo de las deposiciones, etc o derivados del tumor: anemia, dificultad para tragar, deposiciones melénicas (negruzcas). El tratamiento de elección es el quirúrgico, siendo la quimioterapia y la radioterapia tratamientos adyuvantes, es decir, que complementan a la cirugía si existen factores de riesgo. Si el tumor es inoperable o es de gran tamaño puede plantearse una quimioterapia neoadyuvante previa a la cirugía para disminuir el tamaño del tumor y hacerlo operable. La radioterapia también puede utilizarse posteriormente en estos casos. Sólo en los raros casos de linfomas gástricos, no hay que operar y el tratamiento de elección sería la quimioterapia acompañado de una radioterapia posterior. Voy a explicar paso a paso cómo se realiza el proceso del tratamiento con radioterapia en los pacientes con cáncer gástrico.
La primera visita:
En esta visita el oncólogo radioterápico valorará en primer lugar la indicación (o la necesidad) del tratamiento en función de una serie de factores de riesgo. Tendrá en cuenta la edad del paciente, la extensión de la enfermedad, sus enfermedades previas, su estado general, su estado nutricional (muy importante, ya que estos pacientes suelen perder mucho peso tanto en el proceso diagnóstico como en el terapéutico) e incluso su situación personal. Si tras esta valoración inicial se le considera apto para someterse a un tratamiento con radioterapia, su médico hará la prescripción de dosis correspondiente y se le emplazará al siguiente paso: la simulación.
La Simulación:
Constituye el primer proceso previo al tratamiento con radiaciones propiamente dicho. En la primera visita se le darán unas instrucciones para ir convenientemente preparado en caso de que se le vaya a administrar un contraste vía oral. La simulación consiste en hacer una TAC-simulación en las mismas condiciones de posición anatómica en la que vaya a ser tratado. La máquina difiere levemente de una TAC de radiología en que la mesa es plana, suele estar indexada (tiene marcadas unas coordenadas) y que el arco es de diámetro algo más ancho. Sobre la mesa se colocarán unos sistemas de inmovilización con los brazos levantados y se ajustarán a su anatomía. Se le colocará sobre la mesa con dichos sistemas y se procederá colocarle de forma alineada y lo más estable posible. Por fuera, la TAC dispone de unos láseres externos que se utilizan para marcar unas coordenadas sobre la piel que una vez finalizada la exploración le pintarán sobre ella o tatuarán en forma de pequeños puntos casi imperceptibles. Este procedimiento puede durar de 20 a 30 minutos, debe permanecer lo más quieto y relajado posible, respirando de forma pausada para que luego pueda reproducirse el tratamiento. Recomendamos que lleve ropa cómoda y fácil de quitar. Una vez finalizada la exploración, las imágenes realizadas se enviarán a planificación.
La Planificación:
Este es un proceso personalizado de diseño de su tratamiento. Aquí el radioncólogo procederá a contornear en un planificador (ordenador específico para diseñar los haces de tratamiento y hacer los pertinentes cálculos de dosis de radiación) tanto los llamados órganos críticos (órganos sanos que nos interesa reciban no más de una determinada dosis para no dañarlos: médula espinal, pulmón sano, hígado, riñones, intestino delgado, etc) como los tejidos u órganos diana de cada caso (donde si nos interesa que se reciba una dosis tumoricida según cada caso: remanente gástrico o lecho tumoral y los ganglios situados en la vecindad del estómago). A partir de aquí los encargados de hacer la mejor planificación posible serán los técnicos dosimetristas y los radiofísicos. Ellos deberán velar por que nuestra prescripción de dosis se ajuste de la mejor manera posible. Luego el radioncólogo debe supervisar junto con el radiofísico de que todo esté en orden y dará su visto bueno, o no, al tratamiento. Una vez acordado el plan, se validará y ya estará listo para comenzar el tratamiento.
El Tratamiento:
El primer día de tratamiento será un poco más largo que el resto de sesiones, pues estará presente el médico para ratificar que lo planificado se ajusta a la realidad. Se realizarán pruebas de imagen para verificarlo. Si hay alguna pequeña variación se ajustará ese día y se irá comprobando su estabilidad a lo largo de todo el tratamiento. Es también importante para facilitar el trabajo a todos que venga con ropa cómoda y fácil de quitar y esté en la mesa de tratamiento quieto, relajado y respirando con suavidad al igual que en la simulación. Notará como los técnicos de radioterapia le movilizan y hacen pequeños desplazamientos con la mesa. Ayudados por láseres y por los puntos de tatuaje conseguirán reproducir la postura es la que se encontraba cuando le simularon. Es importante que el paciente se deje hacer y no se mueva, pues así facilita el trabajo a los técnicos y encontrarán en menos tiempo la postura adecuada. Si todo lo verificado está bien seguirá con sus sesiones programadas y prosequirá su tratamiento normalmente.
Visitas durante el tratamiento:
Durante el tratamiento su radioncólogo le visitará semanalmente para ver su tolerancia. En esta visita deberá indicar cuanquier síntoma especialmente si está relacionado con su función digestiva: tolerancia de los alimentos, plenitud, náuseas, diarreas y estado nutricional. Si aparece algún problema de toxicidad derivada de la radioterapia, el médico valorará si es necesario o no recibir algún consejo o tratamiento médico. Es importante controlar el peso, pues si la pérdida se acerca al 10% del índice la masa corporal habrá que tomar medidas nutricionales suplementarias. La piel debe mantenerse limpia e hidratada, pero no debe aplicarse ninguna crema antes de las dos horas previas a la radioterapia.
Fin de tratamiento:
Su médico valorará su tolerancia al tratamiento y le dirá la conducta a seguir en relación a consejos médicos y prescripciones médicas. Le proporcionará un informe con todos los datos del tratamiento aplicado y le emplazará a un seguimiento médico con los análisis o pruebas complementarias que considere oportunas.
Seguimiento:
Durante las visitas sucesivas su radioncólogo valorará tanto el estado de la enfermedad como la toxicidad a medio y largo plazo de la radioterapia. Las complicaciones aunque son infrecuentes pueden surgir. Las más importantes son la enteritis, la hepatitis por radiación que puede dar lugar aumento de las transaminasas y otras pruebas hepáticas sin provocar habitalmente clínica, así como una alteración de la función renal. Si surge alguna de estas complicaciones tardías buscará un tratamiento adecuado. Si surgiera una recaída de su enfermedad, el radioncólogo es posible que le haga un seguimiento más estrecho y le indique la conducta a seguir.
Les dejo con un video que explica qué es la planificación en radioterapia.
50 sombras de Gy: ¿Qué es la mucositis oral?
Me voy a centrar en la MUCOSITIS ORAL.
Las consecuencias de la mucositis son:
- Una disminución en la calidad de vida
- Dolor oral importante para hablar, comer, tragar, etc
- Malnutrición por un proceso de evitación y dificultad para tomar los alimentos
- Riesgo de infecciones secundarias
- Posible hospitalización prolongada
- Toxicidad directa: Se disminuye la renovación de la capa basal epitelial (para entendernos no se renueva, como pasa con la piel esa capa primera de la mucosa) debido a la quimioterapia (en la segunda o tercera semana post-tratamiento) y/o la radioterapia (puede aparecer entre la segunda y cuarta semana de tratamiento)
- Toxicidad indirecta: Como consecuencia del efecto tóxico de la quimioterapia sobre la médula ósea (donde se fabrican nuestros glóbulos rojos, los glóbulos blancos o “defensas” y las plaquetas) que disminuye los glóbulos blancos (neutropenia)
- Grado 0: No mucositis
- Grado I: Leve irritación o enrojecimiento de la mucosa SIN dolor
- Grado II: Eritema, edema o ulceración dolorosa que permite la ingesta oral
- Grado III: Eritema, edema o ulceración dolorosa que NO permite la ingesta oral
- Grado IV: Necesidad de alimentación enteral o parenteral por sonda nasogástrica o PEG (Gastrostomía endoscópica percutánea que permite la alimentación directamente al estómago desde fuera a tracés de una sonda)
Factores de riesgo para la mucositis:
- Edad: Cuanto más jóvenes mayor toxicidad sobre la mucosa
- Higiene bucal: Si ésta es deficiente, mayor riesgo de toxicidad
- Estado nutricional: Cuanto mayor grado de desnutrición mayor riesgo
- Localización tumoral: Los tumores localizados en cavum o cavidad oral tienen un riesgo mayor
- Tratamiento: Algunos citostáticos producen más mucositis que otros. En el caso de la radioterapia habrá mayor riesgo en los tratamientos hiperfraccionados, con quimioterapia concomitante y cuya dosis a aplicar sea muy alta.
- Sensación de boca seca y escozor oral
- Dificultad y dolor para tragar, al principio sólidos y luego también líquidos
- Sensación de lengua “algodonosa” o presentación placas blancas en lengua, encías o mucosa oral producida por hongos principalmente (candidiasis o muguet)
- Aparición de vesículas o úlceras hemorrágicas
- Mal sabor de boca, falta de gusto o cambio en el sabor de los alimentos (sabor metálico)
- Secreciones pegajosas o falta de salivación (xerostomía)
Tratamiento:
- Dietético:
- Hacer 6 comidas poco voluminosas sin omitir tomas
- Las tomas no deben coincidir con los momentos de mayor dolor, por lo que conviene hacer un tratamiento analgésico general o tópico que le indique su médico
- Potenciar los alimentos que sean fáciles de masticar y tragar.
- Blandos como el pescado o el pollo
- De textura suave como la patata o la zanahoria cocida
- Cremosos como el flan, yogures, cuajadas, natillas y compotas
- Tomarlos a temperatura ambiente o fríos
- Triturar los alimentos en una batidora cuando el dolor sea importante
- Utilizar “lubricantes” naturales para facilitar la ingesta: mantequilla, crema de leche, bechamel, mayonesa, nata líquida,etc y así suavizar y dar sabor variado a las comidas
- Son recomendables los purés, caldos, cremas, flanes, natillas, huevos revueltos, budin, puré de manzana, sandía, melón o queso untable.
- Se puede utilizar una paja para tomar los alimentos y así se evita el contacto de los alimentos con las heridas y se reduce el dolor
- Usar agua bicarbonatada en la cocción de los alimentos
- Evitar los alimentos irritantes:
- Ácidos: Naranja, limón, kiwi o vinagre
- Salados: Embutidos, conservas, ahumados
- Picantes: cebolla, ajo, pimentón
- Granulados: arroz, verdura fibrosa, pepitas de frutas
- Secos y duros: Frutos secos enteros, galletas, pan tostado
- Adherentes: bollería
- Tabaco y alcohol irritan aún más las mucosas. Deben evitarse.
- Valorar la conveniencia con su médico de tomar suplementos nutricionales (batidos hiperproteicos)
- Valorar la conveniencia de tomar módulos de glutamina para prevenir y aminorar la mucositis
- Si la pérdida de peso es importante habrá que valorar la colocación de una sonda nasogástrica e iniciar una alimentación enteral. En algunos casos puede proponerse una PEG (gastrostomía) profiláctica para asegurar la nutrición.
- Es importante estar bien hidratado. Si es difícil beber agua pruebe con gelatinas o agua gelificada.
- Higiene oral:
- Antes de iniciar un tratamiento con quimio y/o radioterapia es aconsejable acudir al dentista a una revisión para hacer una limpieza bucal y extraer piezas que estén en muy mal estado
- Durante el tratamiento debe utilizarse un cepillo con cerdas blandas y evitar los cepillos eléctricos
- Si se utiliza una prótesis dental conviene no utilizarla durante la radioterapia para que no friccione las encías
- Hacer enjuagues bucales con agua de manzanilla y/o bicarbonato sódico o solución salina al 9%
- Evitar colutorios que contengan alcohol.
- Pueden recomendarse antisépticos en colutorio como la clorhexidina, hexetidina o povidona iodada bucal
- El frío local en forma de helados tipo “polo” o chupar cubitos de hielo puede aliviar el dolor
- Fármacos:
- Analgésicos:
- Antiinflamatorios no esteroideos en una fase inicial
- Opioides por vía transdérmica o nasal en fases más avanzadas
- Tópicos: Lidocaína o mepivacaína en forma de enjuagues antes de las comidas
- Fármacos que revisten la mucosa:
- Acido hialurónico
- Sucralfato
- Glicerina
- Antifúngicos para la profilaxis y tratamiento de infecciones oportunistas por hongos (Candida Albicans):
- Nistatina en forma de enjuagues (Mycostatín)
- Fluconazol
- Otros (uso excepcional):
- Antibióticos y antivíricos
- Bencidamina tópica
- Amifostina
- Palifermina
- Doxepina
Hace poco más de 1 mes recibimos la grata noticia de que un grupo de científicos españoles de la Universidad de Granada patentaban un gel a base de melatonina altamente eficaz contra la mucositis. ¡Enhorabuena!